La inoculación del agua es la alteración del estado natural del líquido vital cuando entra en contacto con agentes externos y tóxicos, lo cual hace que el agua no pueda ser usada, consumida, ni mucho menos empleada para las siembras.
En torno a la contaminación del agua, hay cifras alarmantes que nos hacen valorar cada gota, por ejemplo, el hecho de que anualmente más de 6 millones de personas mueran por ingerir aguas contaminadas, principalmente en sitios muy pobres y donde no es tratada.
El agua es el sustento de nuestra vida, regula el ecosistema y el clima , indispensable para todos. El 97% del agua es de los océanos y el 3% es de agua dulce , teniendo nosotros al alcance solo un 1% porque la restante está en los glaciares.
El sistema en el que vivimos provoca una mala gestión del agua, y si no actuamos al respecto, las próximas generaciones podrían quedar sin este irremplazable elemento.
Ahora bien, ¿Qué es ciclo del agua?
Se trata de la evolución del agua y nos dice cómo se mueve en sus distintos estados, hasta llegar a nuestro consumo. Este ciclo inicia con la evaporación del agua en los océanos y en la superficie de la Tierra, formando las nubes, para luego volver a la Tierra en forma de lluvia, nieve o granizo.
El ciclo del agua hoy día es fundamental para los ecosistemas, sin embargo, el aumento de la temperatura lo afecta y produce un desequilibrio ambiental, generando un sistema climático que se manifiesta en inundaciones y sequías a largo plazo.
Hablemos sobre las causas de la contaminación del agua
Uno de los principales problemas, es que tenemos muy poco conocimiento sobre los productos que usamos y cómo nuestras acciones afectan al ambiente. Hay todo tipo de agentes contaminantes del agua pero, la pregunta importante es: ¿Cuánto nos costará limpiarla? O mejor aún: ¿Cómo evitar la contaminación del agua?
A continuación, nombraremos los principales causantes de la contaminación del agua:
Los monocultivos extensivos:
Este tipo de producción consume mucho líquido vital, en su mayoría emplea el agua subterránea, la cual necesitó miles años para formar reservas y tomará mucho tiempo volver al nivel en que se tuvo antes de bombear.
El estiércol y los fertilizantes tienen un gran impacto negativo en nuestros recursos hídricos, ya que los químicos que se utilizan para las cosechas y los desechos orgánicos llegan a las fuentes de agua y estos, por ende, se contaminan causando la muerte de especies de anfibios y peces.
Ganadería:
El suelo es como una esponja, absorbe el 57% del agua de las lluvias, es decir, queda más agua en el suelo que en los mares y ríos. Sin embargo, cuando el consumo de carne aumenta, también lo hace la ganadería intensiva que genera un alto nivel de amoníaco, disminuye la cantidad de nutrientes y hace que el suelo pierda su capacidad para almacenar agua.
Desechos de aceite:
Aunque no lo creas, una sola gota de aceite puede contaminar el agua que usa una persona durante todo un año, hablamos de unos 40.000 mil litros de agua.
De origen doméstico:
Desde nuestros hogares podemos ser causantes de la polución del agua, ya que, al limpiar, lavar y desinfectar utilizamos químicos, que al irse por las tuberías desembocan en los mares y ríos, generando así un gran impacto al agua y a las especies que habitan en ella.
Contaminación de parte de las industrias:
La industria es una fuente principal de contaminación del agua, ya que muchos desechos y productos químicos son derivados por los procesos industriales y van hacia nuestros mares. Muchísimas empresas desconocen el buen uso que se le debe dar al agua y el cómo generar productos que no sean dañinos y contaminantes para todo el ecosistema.
Sin embargo, durante los últimos años esta problemática ha venido cambiando con nuevas políticas para reducir el consumo de agua y evitar al máximo su contaminación.
¿Qué decir sobre la contaminación de los océanos y mares?
Se calcula que hay más de 14 millones de toneladas de plástico en los océanos y mares.
Las exorbitantes cantidades que terminan en el mar cada día, no solo contaminan las playas, costas y vida silvestre, sino que se alojan en el fondo de los océanos, causando un enorme daño a la vida acuática y al medioambiente.
“Se estima que para el 2.025 por cada 3 toneladas de peces, habrá una tonelada de desechos en el mar”, según una entrevista que Sarah Kollar, jefa de Extensión del Programa Internacional de Limpieza Costera, Mares sin Basura (International Coastal Cleanup Trash Free Seas Program), expuso a un noticiero mexicano.
Uno de los océanos más afectados es el Océano Pacífico, en este lugar se encuentra la famosa isla de basura, que tiene un territorio tres veces mayor a Francia, con un aproximado de 80.000 toneladas de desechos sólidos.
Pero, no solo son los desechos los agentes contaminantes del mar, sino cada vez es más frecuente leer sobre derrames de petróleo en medio del océano, en costas y mar adentro.
Este hidrocarburo es extremadamente contaminante y cuando se derrama, causa un gran problema al sistema oceánico, provocando la muerte y extinción de especies marinas.
¿Cómo influye el coronavirus en la contaminación del agua?
Actualmente, cerca del 70% del plástico generado por el Coronavirus (como guantes y mascarillas ) acaba en vertederos, ríos y mares, lo cual costará un gran precio al medioambiente. Se considera que los tapabocas, no son aptos para el reciclaje porque contienen gérmenes y no solo Coronavirus.
Muchos pensarán que los tapabocas son únicamente tela o papel , no obstante el 70% de su composición es plástico, o sea que más de la mitad de las mascarillas que usamos no son biodegradables, fundamentalmente necesitan un tratamiento térmico para su desintegración, quiere decir que deben ser incineradas y este proceso puede servir para generar energía eléctrica y calor.
Sin embargo, en la mayor parte de los países no sucede esto, sino que las mascarillas terminan en el basurero y son llevadas a las vertientes de agua, es por ello, que te invitamos a que deseches correctamente el cubrebocas, o también puedes reunirlos y llevarlos a jornadas de reciclaje.
Pero no todo es malo: Juntos podemos evitar la contaminación del agua
La mayor dificultad está en que entendamos lo que estamos haciendo y cómo eso afecta al ecosistema, al recurso vital y a nosotros mismos. Tenemos que entender que, si la biodiversidad se deteriora , nosotros también.
Con cada gota que se pierde almacenamos menos agua, esto nos hará llegar a la desertificación de las lluvias, habrá menos precipitaciones, más sequías y las plantas no podrán refrescar los suelos.
¿Qué podemos hacer para no contribuir con la contaminación?
Reducir el uso de plaguicidas, pesticidas y fertilizantes
Estos agentes son los mayores causantes de contaminación del agua en la agricultura . Por ello, invitamos a los agricultores a que hagan uso de pesticidas naturales, lo cual permitirá una agricultura ecológica.
Reducir la deforestación y sembrar más árboles
Es un gran plan, ya que los bosques son grandes acumuladores de agua dulce y a su vez son depuradores de los agentes contaminantes que generamos al medio ambiente.
Desechar correctamente las pilas
Las cuales están compuestas por materiales pesados y al diluirse en las aguas pueden ser consumidas por especies marinas. Ya que tienen componentes altamente tóxicos matan a cantidades enormes de vida en el fondo marino.
Emplear menos químicos en el hogar
Debemos emplear menos productos de limpieza que tengan un alto contenido de azufre, fósforo y nitrógeno. El jabón de lavar ropa al llegar a los ríos, prolifera en las algas de agua dulce, las cuales absorben una enorme cantidad de oxígeno, que le quita vida a la especie acuática (animales y plantas). Por ello, se recomienda hacer uso de detergentes 100% naturales, hechos de materias primas de origen vegetal.
Limitar el consumo de agua en la industria y la agricultura
Ambas son importantes para la humanidad, pero se tienen que implementar acciones que aumenten la eficiencia del uso de este recurso vital que es importante para todos.
Reducir el uso del plástico
No podíamos dejar por fuera al principal contaminante sobre el que sí tenemos control, pues como humanos generamos todo tipo de basura, ya sea en casa, en el trabajo, en reuniones y demás.
Podemos optar por productos o empaques biodegradables, así mismo, teniendo una correcta clasificación y reciclaje de los desechos sólidos, produciremos menos basura y nuestros mares y ríos podrían mejorar su ecosistema.
Desechar correctamente el aceite
Ya vimos lo que puede hacer solo una gota de aceite que cae al agua. ¿Cómo desecharlo correctamente? Echando el aceite usado en un pote o envase, y no tirándolo por las tuberías. Con el aceite que guardes puedes hacer velas o velones y darles un uso muy especial.
Nutrir nuevamente los suelos para la siembra
Podemos dar descansos entre siembras, para conseguir efectos de regeneración estructural y producir suelos saludables.
Otras soluciones para evitar la contaminación del agua
Todo abarca al agua, desde las telas hasta las flores y los agentes químicos que contiene el agua de los ríos hablan de su sociedad. Pero esto lo podemos solucionar con la ayuda de la concientización de reciclaje que se implemente en las instituciones educativas.
Por otro lado, es necesario aplicar políticas industriales más conscientes en cuanto a la creación de productos, haciendo uso de fuentes de energía como la solar, eólica o hidroeléctrica.
Implementar políticas sobre el uso de las bolsas plásticas y sus derivados es fundamental para reducir la cantidad de desechos sólidos en el mar.
Finalmente, sabemos que el elemento más importante de la Tierra es el agua, sin embargo, para preservarla debemos hacer cambios significativos que garanticen un consumo consciente de este elemento tan vital para la vida en todas sus formas.
Para concluir, podemos decir que la solución está en las pequeñas acciones que hacemos día a día nuestras manos. No malgastemos el tiempo y los recursos naturales, reciclemos y salvemos nuestro medio ambiente.